blended learning

El aprendizaje híbrido en la era post-covid

Tecnología

El sector educativo ha cambiado y no hay vuelta atrás. Una nueva encuesta global del Foro Económico Mundial revela que siete de cada diez adultos en todo el mundo (72%) piensan que, dentro de cinco años, la enseñanza superior se realizará online como mínimo tanto como de forma presencial. En concreto, una cuarta parte de los adultos de todo el mundo (23%) cree que en cinco años, la educación superior en su país se llevará a cabo en su totalidad o en su mayor parte, online. La otra mitad (49%) cree que se llevará a cabo tanto online como presencial.

Ahora que los países están llevando a cabo sus procesos de vacunación, es tiempo de pensar en el mundo post-pandemia. Los resultados de la encuesta reflejan que empezamos a intuir que algunas cosas probablemente no vuelvan a ser como antes. Las prioridades cambiarán: mientras hace un año el reto principal era garantizar la continuidad de los procesos de aprendizaje por medio de diferentes metodologías no presenciales, hoy se suma el desafío de implementar un modelo híbrido (blended) que incluya una combinación de esquemas presenciales y no presenciales (eLearning) de aprendizaje.

El principal beneficio de este nuevo enfoque para el estudiante es la flexibilidad de poder realizar tanto clases presenciales como el seguimiento asíncrono de las mismas si así lo prefiere, por ejemplo, para combinar con un horario laboral (muy importante pensar en estudiantes de todo tipo y edad, pues todos seremos lifelong learners). Desde el punto de vista de las universidades, el hecho de poder captar alumnos que puedan seguir sus clases desde cualquier parte del mundo puede ser una auténtica revolución.

Las implicaciones son de gran envergadura. ¿Cómo responder a las expectativas de los alumnos en cuanto a experiencias digitales perfectas? ¿Cómo competir en un nuevo contexto mucho más globalizado? ¿Cómo pasar de un modelo de captación eminentemente presencial de los alumnos, a un nuevo contexto digital? Por no hablar de la digitalización del aula, de la transformación digital del contenido educativo, de los procesos de evaluación, etc. Este año más que nunca, el sector educativo se enfrenta a un verdadero desafío. De hecho, podríamos estar al inicio de un colosal proceso de transformación de un sector entero.

La transformación digital del learner journey

Para responder a este entorno de nuevas expectativas del alumnado, las universidades más exitosas serán aquellas cuyas operaciones estén completamente digitalizadas y respondan a la demanda de los estudiantes, para todas y cada una de sus interacciones.

Lo que sigue es una aproximación a esa transformación a lo largo del learner journey: awareness inicial, engagement y omnicanalidad, proceso educativo, y evaluación y graduación.

learner journey
  • Awareness. La clave para gestionar con éxito el proceso de captación será doble. En primer lugar, estudiantes bien informados que tienen acceso a la información correcta en el momento adecuado para ayudarlos a tomar sus decisiones, por ejemplo, mediante el uso de chatbots y asistentes de voz que los guíen en el proceso de decisión. Las universidades deberán repensar sus procesos comerciales y abrazar nuevas estrategias de marketing para poder competir en el nuevo contexto. Por otro lado, deberán ser capaces de proporcionar desde el inicio una experiencia digital para estudiantes centrada en el autoservicio y la automatización para que los estudiantes puedan navegar fácilmente a través de su proceso de admisiones.
     
  • Engagement. Para destacar en el nuevo contexto debemos lograr una experiencia digital memorable para el alumnado. Esto no será posible sin el valor de la customización incluso a nivel de cada alumno en particular: trabajar con tecnologías tipo “DXP” que ofrezcan funcionalidades de personalización y de visión 360 del usuario será esencial para ofrecer una experiencia acorde a las necesidades y expectativas. Además, debemos tener presente la importancia de contar con la tecnología que facilite la implementación consistente y sin fricción de todas las soluciones de las instituciones educativas a través de los distintos canales y todo tipo de dispositivos móviles: desde desktop, tablets, hasta smartphones, etc.
     
  • Education. Deberán habilitarse herramientas síncronas de consumo que nos permitan trabajar con estudiantes siguiendo las clases desde el aula y desde casa, interactuando entre sí y con el profesor en real time. Y a la vez alimentar el lado asíncrono, es decir, que los estudiantes que así lo prefieran puedan conectarse más tarde a la clase o realizar una revisión de la misma, por ejemplo con herramientas tipo LMS. Más que transformar los contenidos físicos a formato digital, típico durante la pandemia, deberemos tener en cuenta el enfoque híbrido desde el inicio, esto es, desde el proceso de creación del contenido educativo. Las plataformas de experiencia de aprendizaje (LXP) serán híbridas
    Además, gracias a nuevos estándares de eLearning como xAPI, que permite almacenar las interacciones de una persona ante distintas actividades de aprendizaje en línea, se obtendrán datos e insights proporcionando una vista de 360 ​​grados de las interacciones de los estudiantes y al combinar con técnicas de IA se ofrecerán rutas de aprendizaje y recomendaciones totalmente personalizadas. La interoperabilidad será una de las claves para ofrecer una experiencia unificada y sin fisuras tanto para el alumno, como para el educador.
     
  • Evaluation & graduation. La transformación del proceso educativo nos lleva al reto de la evaluación a distancia. En este sentido, es totalmente necesario garantizar la identidad, la ausencia de ayuda o no suplantación de la persona. La solución en este caso es la tecnología de eproctoring, la cual nos permite digitalizar los procesos de evaluación. Esta tecnología utiliza inteligencia artificial y reconocimiento facial para verificar la identidad de un estudiante y monitorizar la actividad del alumno durante el examen. De esta manera logramos mantener la misma integridad y calidad de los exámenes presenciales pero en un medio online. Finalmente, la generación de los títulos de los estudiantes también deberá ser digitalizada. Aquí la tecnología blockchain se impone como el nuevo estándar para la emisión de credenciales digitales proporcionando a los graduados tokens únicos, verificables por los empleadores, a prueba de manipulaciones y de por vida.
Conclusiones

El sector de la educación está entrando en una era de disrupción, si atendemos a los resultados de la encuesta. La transformación del sector es un reto inmenso, pero a la vez una oportunidad apasionante. Aquellos actores que sepan aprovecharla mediante la implantación de modelos híbridos de aprendizaje con uso intensivo de la tecnología, centrados en maximizar el valor para el estudiante a lo largo del learner journey, serán los mejor posicionados para el éxito.

Martí Fàbrega

Martí es Consultor de Transformación Digital y Senior Manager de Desarrollo de Negocio en SEIDOR Opentrends. Su propósito es transformar la tecnología en valor de negocio para sus clientes, poniendo el mayor foco posible en la innovación.